Todo trabajador es persona, y por tanto titular de derechos fundamentales al interior de la empresa, así en el caso de vulnerarse estos derechos el trabajador(a) podrá recurrir a los Juzgados del Trabajo utilizando el juicio de Tutela Laboral cuando se afecte:
- El derecho a la vida y a la integridad física
- El respeto y protección a la vida privada y a la honra del trabajador y su familia
- La inviolabilidad de toda forma de comunicación privada
- El derecho a la libertad de conciencia, a la manifestación de todas las creencias y al ejercicio libre de todos los cultos
- La libertad de emitir opinión y la de informar, sin censura previa, en cualquier forma y por cualquier medio
- La libertad de trabajo y el derecho a su libre elección
- El derecho a no ser sujeto de los actos discriminatorios señalados en el artículo 2 del Código del Trabajo
- La libertad sindical y el derecho a negociar colectivamente sin obstáculos indebidos
- La garantía de indemnidad, que consiste en no ser objeto de represalias ejercidas por el empleador, en razón o como consecuencia de la labor fiscalizadora de la Dirección del Trabajo o por el ejercicio de acciones judiciales o su participación en ellas como testigo o por haber sido ofrecidos en tal calidad
- Prácticas antisindicales o desleales en la negociación colectiva.
Este procedimiento de tutela laboral, es aplicable a las vulneraciones de derecho producidas durante la vigencia de la relación laboral, así como si la vulneración se produce con ocasión del despido.